Luego de un largo y pesado viaje por fin se encontraba en las instalaciones de lo que sería su nuevo hogar durante tanto tiempo como lo dispusiera su suerte, de la misma manera empezaría una nueva vida completamente distinta a la que había llevado y sin ninguna esperanza de que algún día despertara de esa ilusión.
Llegó completamente sólo y desconcertado de su entorno, no se fijaba en el lugar ni en nada de lo que pasara a su alrededor, simplemente se sentó en un sillón de la amplia recepción y ahí se acurrucó para llorar en silencio y confortarse a si mismo, pronto tendría que acostumbrarse a estar en ese lugar.